València transpira pasión por la música. Desde la tradición secular por las bandas, esta es una ciudad que ha hecho de las armonías, movimientos y acordes su leitmotiv particular. ¿Por qué, si no, coronarían unos ángeles instrumentistas del Quattrocento la bóveda principal de la Catedral? ¿Cómo, de no ser así, habría llegado la ciudad a acoger la única escuela fuera de los Estados Unidos de Berklee College of Music, la universidad musical privada más grande del mundo? Nada de esto es fruto de la casualidad.
Los relatos de los hombres y mujeres que, a lo largo de los tiempos, se han inspirado o han desarrollado en las calles de la milenaria urbe sus carreras en la composición o en la dirección, como concertistas o cantantes, pero siempre sintiéndose músicos, cuentan una historia que merece ser escuchada. Para conocerla, recorramos algunas de las plazas, vías y avenidas que han sido dedicadas a estos artistas, en una declaración del amor melómano más puro. Valgan unos pocos, pero significativos, ejemplos.
Calle de Conchita Piquer
Doña Concha Piquer, a comienzos del siglo XX, llevó la copla a conquistar el mundo. A los 11 añitos esta voz portentosa ya se dio a conocer en el Teatro Sogueros de València. Con 16 cruzó el charco, para sacudir los cimientos de Broadway. Participó en una de las primeras películas sonoras de la época y marcó tendencia. Eso sí, siempre cargada con un baúl repleto de ropas, enseres y hasta viandas de la tierra, el famoso “baúl de la Piquer” de centenares de idas y vueltas por el mundo. Hoy, su casa natal se ha convertido en museo que recuerda la trayectoria de esta auténtica hija pródiga.
Calle del Maestro José Serrano
A este compositor de más de cincuenta zarzuelas se le recuerda, fundamentalmente, por sus creaciones más populares. Es autor del himno de la Exposición Regional Valenciana de 1909, adoptado oficialmente más tarde como el de la Comunitat Valenciana. A él también se debe el archifamoso pasodoble “El fallero”, todo un clásico de los pasacalles y actos oficiales durante las fiestas en honor a San José. Un monumento en la avenida Antic Regne de València, integrado por fuente y figura en bronce, rinde homenaje al maestro y es visitado por las Falleras Mayores de València y sus cortes de honor, cada 18 de marzo, en una emotiva ofrenda de flores.
Calle de Francesc Tàrrega
Gran músico y virtuoso de la guitarra que llegó a actuar en París y Londres. Su labor creativa es importante e incluye piezas tan conocida como Recuerdos de la Alhambra. Aunque seguramente jamás imaginó que la melodía que le haría eterno es la que inspiró el politono más famoso de cuantos hayan sonado alguna vez: el clásico de Nokia. ¿Quién puede predecir aquello por lo que se le recordará? Trece notas de su Gran Vals alcanzaron, gracias a un móvil, la eternidad.
Calles de la pianista Amparo Iturbi y de José Iturbi
Los hermanos Iturbi, Amparo y José, fueron unos precoces y muy talentosos pianistas. Su depurada técnica les hizo alcanzar muy tempranamente la fama internacional. José fue concertista, compositor y director. Su fama internacional alcanzó su cénit cuando debutó en Estados Unidos y se consagró a la dirección de su propia orquesta y otras famosas agrupaciones, siempre actuando en compañía de su hermana. Fue reclamado por Hollywood como pianista de comedias musicales para la Metro Goldwyn Mayer, lo que le supuso obtener una estrella en el mítico Paseo de la Fama. Amparo, aunque un tanto ensombrecida por la figura de José, destacó como gran virtuosa. Desde 2021, diferentes espacios de la ciudad acogen el Festival Internacional de Piano València Iturbi, donde se dan cita músicos de referencia del panorama nacional e internacional. La sala principal del Palau de la Música lleva el nombre de José.
Avenida del Maestro Rodrigo (músico) y calle Joaquín Rodrigo Vidre
Este afamado creador, nacido en la vecina localidad de Sagunto, alcanzó el olimpo de la música gracias a una magnífica composición para guitarra y orquesta, el celebérrimo Concierto de Aranjuez. Rodrigo, profeta en su tierra, cuenta con dos vías urbanas consagradas a recordarle. Además, el Palau de la Música le dedicó su sala de cámara y el conservatorio superior de música de València también porta su nombre.
Calle de Nino Bravo
València no olvida la voz más potente e inconfundible que ha dado la terreta, la de Luis Manuel Ferri Llopis, conocido artísticamente como Nino Bravo. Poseedor de unas cualidades vocales excepcionales, este valenciano es recordado por canciones tan inolvidables como “América, América”, “Noelia” o “Libre”, que se convirtió en un himno. Su muerte temprana en accidente de tráfico inició su leyenda. Un busto rememora su historia en el parque donde se encontraba el antiguo cine de verano donde comenzó su carrera como cantante (calle Lérida).
La ciudad también ha dedicado calles a Vicent Martín i Soler, el Mozart valenciano, a la compositora y folclorista María Teresa Oller i Benlloch, a la soprano Lucrecia Bori o al tenor Antonio Cortis, conocido como el Caruso español.
¿Te gustaría disfrutar con una muestra del arte de todos los músicos a los que València recuerda? No te prives del placer y escucha la playlist #MúsicosConMuchaCalle, con sonido valenciano.